Dicen agente del cuerpo del orden está disfrutando de privilegios que un reo común no tiene en una cárcel pública
Los abogados de la familia del niño Donelly Joel Martínez, muerto a tiros por un agente de la Policía Nacional en un operativo durante el segundo desfile del carnaval en Santiago, el pasado mes de febrero, solicitaron que el imputado por ese crimen sea trasladado de la cárcel de Operaciones Especiales, en Manoguayabo, Santo Domingo Oeste, donde cumple prisión preventiva.
El jurista Fausto Vásquez, hablando en representación de la familia, explicó que hacen la solicitud ante la Corte de Apelación para que se revoque la decisión del tribunal de Atención Permanente, debido a que el agente, Alejandro Castro Cruz, supuestamente "se la pasa fuera de la celda compartiendo con los agentes penitenciarios".
"Tenemos información de que él está disfrutando de privilegios que un reo común no tiene en una cárcel pública", declaró Vásquez.
Considera que la cárcel de Operaciones Especiales en Manoguayabo es un centro para miembros de la institución que cometen faltas leves.
La Corte tiene previsto conocer dicho recurso el 22 de este mes, la misma fecha en que será conocida la revisión obligatoria de los tres meses de prisión preventiva, como medida de coerción, que le fue impuesta al agente.
La tragedia del niño, de tan solo 11 años de edad, causó un repudio generalizado por la mala actuación de los agentes del cuerpo del orden que participaron en el operativo.
El menor de edad murió la tarde del domingo 12 de febrero en la sala de emergencia de un centro de salud privado de Santiago, a causa de dos heridas de bala. Una le fue propinada en el pecho y la otra en su mano derecha.
El Niño se encontraba sentado en una silla, cuando los uniformados se presentaron a las inmediaciones de la avenida Las Carreras esquina calle Mella, a incautar el equipo de sonido con el que escuchaba música en el frente de la peluquería su padre, Antony Martínez.
En el intento de llevarse la bocina, uno de los policías disparó varias veces su arma de reglamento, impactando al niño