Monseñor Morel Diplán expresó que el sacerdote Nelson Rafael Paulino actuó de buena fe, al firmar la carta a título personal.
El sacerdote Nelson Rafael Paulino no tenía autorización de la Iglesia, para firmar la carta al exdiputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Miguel Gutiérrez, quien fue condenado a 16 años de cárcel en los Estados Unidos por narcotráfico, de acuerdo con el obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santiago, Carlos Tomás Morel Diplán.
“La arquidiócesis de Santiago, desde hace más de 15 años, trazó una norma a todos los sacerdotes de que no debían emitir una carta a favor de una persona que estuviera en un caso judicial, y esa norma se estableció aquí en la diócesis”, manifestó monseñ Morel Diplán.
Asimismo, planteó que para la iglesia no es conveniente que se entreguen ese tipo de cartas a personas que estén involucradas en un proceso legal, para no interferir con el procedimiento judicial.
“Esa es nuestra posición y lo hemos repetido muchas veces en la parroquia, que no debemos entregar cartas a favor de nadie o en contra de nadie, que esté en un proceso judicial para no interferir en el proceso y dejar que los jueces hagan su trabajo, que la justicia investigue y que clarifiquen las cosas”, indicó el obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santiago.
Monseñor Morel Diplán expresó que el sacerdote actuó de buena fe, al firmar la carta a título personal, sin hacer uso del sello de la iglesia.
“En el caso del padre Nelson Paulino sucedió que la carta no la hizo él, la carta la hizo su madre (…) pero al parecer el sacerdote, amigo de la señora, firmó la carta a título personal, no la hizo, sino que la firmó, ni colocó tampoco el sello de la parroquia, para no comprometer a la iglesia”, indicó el prelado.
Además, dijo que la iglesia lamenta la situación y aclaró que el padre Paulino no conocía al exdiputado, sino a la madre, quien se acercó a él, en un estado de desesperación por la situación de su hijo.
“Lamentablemente ha pasado esto, pero no es el proceder de la iglesia, yo sé que mucha gente está pensado que la iglesia tomó dinero, pero no es así, en lo absoluto”, explicó Monseñor Morel Diplán.
Asimismo, manifestó que desde el punto de vista canónico, la firma de este tipo de cartas no está penado, por lo que el sacerdote no será sometido a ningún tipo de amonestación.
“Hablamos con él y se siente muy apenado y muy preocupado por lo sucedió, pidió disculpas, porque no pensó que eso iba a tener esa trascendencia en la sociedad”, expresó Monseñor Carlos Tomás.
Monseñor señaló que muchas personas cercanas a los sacerdotes o a las iglesias, se acercan en momentos difíciles, para solicitar cartas de apoyo, en una iniciativa impulsada por los abogados. Sin embargo no lo apoyan.
“Es una iniciativa generalmente de los abogados, porque los abogados ven que es un camino más fácil y una fortaleza que la iglesia una institución con solvencia moral, actúe o defienda a esa persona, pero como iglesia nosotros no apoyamos esa parte”, indicó el prelado.
Afectada por la prueba
Madre.
La madre del imputado Miguel Gutiérrez se declaró responsable de que un sacerdote y decenas de ciudadanos residentes en Gurabo firmaran y enviaran una misiva a una corte de Estados Unidos, que abogaba por un hombre condenado a 16 años por narcotráfico. Norma Díaz Peña, de 82 años, madre del exdiputado Gutiérrez, dijo que el sacerdote Paulino acudió ante el clamor de una madre afectada por la prueba.