Monseñor Héctor Rafael Rodríguez Rodríguez, arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago, planteó la necesidad de luchar por una sociedad más justa y calificó como una comedia aplaudir las guerras.
El prelado católico reflexionó así al presidir la eucaristía ante miles de católicos que abarrotaron el estadio Cibao el jueves con motivo del Día de Corpus Christi.
Monseñor Rodríguez Rodríguez enfatizó que esta fecha es para renovar los compromisos de esperanza, de paz, de justicia social y comprensión, considerando que la celebración debe llevar a la población a un estilo de vida solidario, amoroso y de paz cómo la que vivió Jesús.
“Nosotros en la Iglesia Católica somos celosos en la celebración eucarística y que no haya chapuceros y no permitan cometer abusos”, indicó.
Señaló que la eucaristía corre el riesgo de quedar vacía de contenido cuando se convierte en una práctica rutinaria.Entiende que es contradictorio compartir el pan eucarístico ignorando el hambre de miles de personas.
El religioso refiere que el deber del sacramento de la solidaridad es preocuparse por los hambrientos de la sociedad, por lo que llama a escuchar la palabra de Dios y oír el grito de los necesitados.
“Es contradictorio y abusivo celebrar el sacramento del amor y salir a odiar y no perdonar es contradictorio y abusivo ante situaciones de justicia”, agregó
Asimismo, califica como una comedia darse las manos sonrientes y aplaudir las guerras, o ver las acciones de violencia y aplaudir otros males, lo que afirmó constituye en una pantomima.