
“Somos los únicos que realmente nos enfrentamos a los bandidos”, dice uno de los oficiales, bajo condición de anonimato. “Los demás países se encargan de la seguridad de edificios o de evacuar heridos. La parte peligrosa es toda para nosotros,” añade.
Desde junio de 2024, soldados kenianos de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS) en Haití patrullan las zonas controladas por las bandas armadas en Puerto Príncipe, enfrentándose a la violencia constante y a condiciones precarias, en medio de una crisis humanitaria que mantiene al país al borde del colapso.