
Los afectados calificaron la situación como una injusticia y aseguraron sentirse marginados por las autoridades educativas, señalando que “el bono fue repartido por caritas, como si fuera un favor y no un derecho laboral”.
El Ministerio de Educación inició de manera parcial la entrega del bono anual a un grupo de empleados de esa institución que había denunciado la falta de pago de ese incentivo.
Según denunciaron colaboradores, quienes declinaron identificarse por temor a ser desvinculados, el actual ministro, Luis Miguel de Camps, realizó el pago del incentivo solo a un grupo reducido de trabajadores, dejando fuera a cientos de servidores que también cumplen funciones importantes dentro de la institución estatal.
Los afectados calificaron la situación como una injusticia y aseguraron sentirse marginados por las autoridades educativas, señalando que “el bono fue repartido por caritas, como si fuera un favor y no un derecho laboral”.
Ante esto, los empleados hicieron un llamado al presidente Luis Abinader para que intervenga en la situación y que sea investigado el desempeño del ministro de Camps.
En la denuncia, uno de los afectados solicitó a este diario ayuda señalando que "esto va mal en todos los ámbitos del Ministerio”.
La denuncia
Un grupo de empleados del Ministerio de Educación (Minerd) denunció de forma anónima la crisis por la que están pasando por la falta de pagos correspondientes a algunos servicios.
Según manifestó uno de los denunciantes, “no se están pagando los viáticos ni el bono correspondiente al mes pasado”, un bono que se entrega anualmente a cada empleado por su desempeño en la cartera educativa.
Destacó que tampoco se están atendiendo las solicitudes de materiales ni equipos necesarios para “poder hacer bien nuestro trabajo”.
Entre estas faltas también indicó que no se les está pagando el combustible para trasladarse a los diferentes puntos, “no se está entregando como debería”, mientras que no se está cumpliendo con el pago de las horas extras y de dietas.
“Estamos trabajando con muchas limitaciones y sin el apoyo que merecemos”, manifestaron, pero pidieron no revelar sus identidades por temor a represalias.
Estas denuncias surgieron luego de la designación el 2 de febrero de este año de Luis Miguel de Camps como ministro de Educación, quien antes dirigió el Ministerio de Trabajo.