
Jerusalén.- El Ministerio de Sanidad de Gaza informó de cuatro nuevas muertes por “hambruna y desnutrición” registradas el miércoles, dos mujeres y dos hombres, una de ellas anciana, con lo que el balance asciende a 239 fallecidos por estas causas desde el inicio de la ofensiva israelí en octubre de 2023. De ese total, 106 eran niños, según los datos divulgados este jueves, que corresponden al día anterior.
Sanidad, dependiente de la autoridad de Hamás en el enclave, señaló que los decesos vinculados a desnutrición han aumentado en las últimas semanas. Organizaciones humanitarias sitúan el repunte en el contexto del bloqueo total impuesto por Israel entre el 2 de marzo y el 19 de mayo, que interrumpió la entrada de alimentos, medicinas y combustible, y de la escasez persistente desde entonces.
La ONU advirtió que Gaza está al borde de la hambruna, al indicar que más de un tercio de la población pasa días sin comer y que los indicadores de malnutrición han alcanzado niveles críticos desde el inicio del conflicto. Según la Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria, se han alcanzado dos de los tres umbrales de hambruna —colapso del consumo alimentario y malnutrición aguda; el tercero, mortalidad por desnutrición, no se ha podido demostrar plenamente de forma independiente.
Bajo presión internacional, Israel anunció a finales de julio “pausas humanitarias” en ciertas rutas para facilitar el ingreso de ayuda. COGAT y otras autoridades israelíes señalan que actualmente entran unos 300 camiones diarios, frente a 50–100 en junio y alrededor de 200 tras el inicio de las pausas, mientras que ONG y fuentes locales sostienen que el volumen sigue por debajo del mínimo de 500 requerido y denuncian incidentes de saqueo antes de la distribución organizada. El Gobierno de Gaza cuestiona además las cifras oficiales y las rebaja de forma significativa.