
Una semana de luto en el arte dominicano: mueren Franklin Domínguez, Angelita Curiel y Miguel Ángel Martínez
En menos de una semana, la República Dominicana ha despedido a tres figuras fundamentales del arte y la cultura: el dramaturgo y director Franklin Domínguez, la vedette y actriz Angelita Curiel ("la Mulatona") y el actor Miguel Ángel Martínez.
Sus muertes, ocurridas con apenas días de diferencia, marcan una dolorosa coincidencia para el medio artístico dominicano, que hoy siente el peso de un luto colectivo.
Franklin Domínguez: el arquitecto del teatro dominicano
Fallecido el martes a los 94 años, Franklin Domínguez fue una institución viviente del teatro. Galardonado con el Premio Nacional de Teatro y el Premio Nacional de Literatura, su legado incluye más de 70 obras dramáticas, muchas de ellas representadas y traducidas en distintos continentes.
Además de su labor como dramaturgo, fue director de Bellas Artes, promotor cultural, actor y docente. Desde su natal Santiago de los Caballeros, forjó una carrera que definió buena parte del teatro dominicano del siglo XX.
Su fallecimiento fue lamentado por figuras del ámbito cultural y autoridades, entre ellos el ministro de Cultura, Roberto Ángel Salcedo.
Angelita Curiel: la irreverente y poderosa "Mulatona"
El domingo, apenas unos días antes, se informó el deceso de Angelita Curiel, mejor conocida como "la Mulatona", a los 66 años, tras complicaciones de salud derivadas de una insuficiencia renal y una reciente fractura de fémur.
- Figura icónica del vedetismo dominicano en los años 80 y 90, Curiel fue parte esencial de programas como El Show del Mediodía y El Show de Luisito y Anthony. Su carisma, presencia escénica y actitud desafiante rompieron esquemas en la televisión nacional.
Más allá del espectáculo, representó a una mujer empoderada en un medio que no siempre dio espacio a voces femeninas como la suya.
Su hijo, Steven Curiel, confirmó su fallecimiento desde la unidad de cuidados intensivos del Hospital General Plaza de la Salud.
Miguel Ángel Martínez: el rostro sereno del teatro y el cine
Un día antes, el sábado, el país se enteró del fallecimiento de Miguel Ángel Martínez, actor emblemático del teatro y el cine dominicano, hallado sin vida en su residencia.
- Martínez formó parte de películas como La soga, Ladrones a domicilio, La lucha de Ana y Trópico de sangre, además de tener una larga trayectoria teatral con montajes como Antígona, Fuenteovejuna y Bodas de sangre. Inició su carrera en 1972, y durante más de cinco décadas mantuvo una presencia constante en el arte escénico nacional.
El cineasta Ángel Muñiz, con quien trabajó en múltiples ocasiones, lamentó su pérdida, destacando su profesionalismo y calidad humana. La Asociación Dominicana de Actores de Cine (ADAC) también expresó su pesar.
Un vacío irremplazable, un legado inmortal
La coincidencia de estas tres muertes en un mismo período ha generado una ola de reflexiones en el medio artístico.
Aunque cada uno tuvo una trayectoria distinta, el guion impecable de Domínguez, la chispa irreverente de Curiel, la fuerza silenciosa de Martínez, todos compartieron un compromiso inquebrantable con el arte, el escenario y el público.
- Sus muertes no solo entristecen a quienes los conocieron o trabajaron con ellos, sino también a las nuevas generaciones que hoy encuentran en su legado una inspiración para continuar el camino que ellos ayudaron a trazar.
En una semana marcada por la pérdida, el arte dominicano también se fortalece al recordar a quienes lo elevaron con talento, entrega y dignidad.