
Santo Domingo. – El Instituto Dominicano de Meteorología informo que continuaran las lluvias este fin de semana producto de una vaguada pre-frontal, asociada a un sistema frontal que se ubica sobre la porción oriental de Cuba, estará afectando las condiciones del tiempo sobre el país. Por tanto, en las primeras horas del día, se observan aguaceros, tronadas y posibles ráfagas de viento en las provincias Barahona y Pedernales, así como otros chubascos en localidades de la cordillera Central y la zona fronteriza.
En tanto, para la tarde hasta primeras horas de la noche, a estas condiciones se sumarán a los efectos asociados al ciclo diurno, para generar aguaceros fuertes en puntos aislados, tormentas eléctricas y posibles ráfagas de viento sobre poblados en las provincias: El Seibo, Hato Mayor, La Vega, San José de Ocoa, Azua, San Juan, Elías Piña, Santiago, Santiago Rodríguez, Dajabón, Puerto Plata, entre otras áreas.
El sábado, se prevé que la vaguada y una onda tropical continúen afectando las condiciones del tiempo sobre nuestra nación, por tanto, estaremos observando lluvias de manera dispersa durante las horas matutinas hacia provincias en la porción oriental y noreste del país. En la tarde, el calor asociado al ciclo diurno también contribuirá a que se incremente la nubosidad y se generen aguaceros, tronadas y ráfagas de viento en poblados pertenecientes a las provincias: La Altagracia, La Romana, El Seibo, San Pedro de Macorís, Hato Mayor, Santo Domingo, Monte Plata, Sánchez Ramírez, Duarte, San Cristóbal, San José de Ocoa, La Vega, Monseñor Nouel, Santiago, Azua, Elias Pina, Dajabon, Independencia, Bahoruco y El Gran Santo Domingo. Al iniciar la noche, las lluvias disminuirán de manera gradual, pero sin desaparecer por completo, estándose que continúen ocurriendo aguaceros y tronadas, sobre todo en poblados próximos a las costas norte y sur del país.
Debido a las lluvias pronosticadas, mantenemos los niveles de alerta y aviso meteorológico en 9 provincias ante el riesgo de inundaciones urbanas, rurales, desbordamientos de ríos, arroyos y cañadas, así como deslizamientos de tierra, principalmente en sectores vulnerables
 
			 
		    





