
“Él me visitaba y yo le decía: Mario, usted es un hombre enfermo, no puede seguir en esto, porque eso lo va a enfermar más”, narró.
SANTIAGO. – El presidente de la Federación de Trabajadores del Transporte de la Región Norte (FETRANRENO), Gervacio de la Rosa, lamentó profundamente la muerte del dirigente choferil,
Mario Ureña, a quien definió como “un hombre trabajador, serio y uno de los buenos dentro del movimiento sindical”.
De la Rosa afirmó que Ureña “no se merecía ese tipo de muerte”, y aseguró que durante meses le advirtió que no debía involucrarse en una nueva ruta que calificó como “un infierno”, debido al nivel de conflicto y presión que enfrentaría. “Él me visitaba y yo le decía: Mario, usted es un hombre enfermo, no puede seguir en esto, porque eso lo va a enfermar más”, narró.
Recordó que en una ocasión Ureña sufrió un infarto mientras atendía asuntos de una ruta afiliada a la federación. Según explicó, fue internado durante varios días en cuidados intensivos en la Clínica Materno Infantil, donde logró recuperarse. “Yo asumí todos los costos para que pudiera salir adelante y siempre lo ayudaba”, dijo.
El dirigente sindical responsabilizó a sectores del transporte en Santiago y Santo Domingo de haberlo presionado para asumir responsabilidades en esa nueva ruta, lo que, a su juicio, agravó su salud. “Su esposa, sus hijos y sus hermanos sabían que él no podía seguir en eso. La vida vale más que cualquier otra cosa”, expresó.
De la Rosa destacó que Ureña era un colaborador leal, respetado por choferes y dirigentes. “Nos duele mucho su muerte, y más la forma en que ocurrió. Era un hombre bueno, fiel y dedicado”, aseguró.






