SANTO DOMINGO-. El gobierno anunció medidas para mitigar los efectos de la sequía por la que atraviesa la República Dominicana.
Entre ellas figuran la disminución del caudal de salida de agua desde algunos embalses, como Tavera y Hatillo; mantener la presa de Valdesia en operación para abastecer solo los acueductos que dependen de ella, como los de las provincias Santo Domingo, San Cristóbal y Valdesia, quedando limitados su uso agrícola y la generación hidroeléctrica.
En cuanto a los acueductos que tienen su obra de toma en el canal Ulises Francisco Espaillat (UFE), que se abastece de la presa de Tavera y que tiene una longitud de 73 kilómetros desde Santiago hasta Montecristi, se acordó la construcción de ataguías provisionales en los puntos requeridos para facilitar el suministro de agua.
Igualmente, se convino intensificar la labor de monitoreo de los aportes de las cuencas que suplen los embalses, con el objetivo de proyectar la evolución de los caudales para las próximas semanas.
Las medidas fueron anunciadas tras una reunión del Gabinete del Agua cuyos integrantes recomendaron que se mantenga un uso eficiente y racional del agua.
En la reunión participaron Miguel Ceara Hatton, ministro de MMARN; Gloria Ceballos, directora de la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET); Rafael Salazar, administrador de la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID); Wellington Arnaud, director del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA); Olmedo Caba Romano, director ejecutivo del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) y anfitrión del encuentro; Gilberto Reynoso, director ejecutivo del Gabinete del Agua, y Andrés Burgos, director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (CORAASAN), entre otros.