Los datos del Observatorio Permanente de Seguridad Vial recopilan más de 3,000 muertes anuales por accidentes de tránsitos en las carreteras del país.
Las violaciones a las leyes de tránsito e imprudencias volvieron a estar ayer a borbotones en las calles y avenidas de la capital, la mayor parte de esas provocadas por motociclistas.
La obstrucción del paso de cebra es lo menos, un comportamiento visto en cualquier vehículo de motor posible que es opuesto a la libre circulación de los peatones. Esto quedó fijado en las avenidas John F. Kennedy, Máximo Gómez, Ortega y Gasset y en la Lope de Vega.
Sin embargo, la temeridad no es exclusiva de quienes toman el volante. Los peatones guardan culpabilidad una vez cruzan las carreteras en puntos indebidos, en lugar de acercarse a las líneas para estos fines o subir las escaleras de los puentes peatonales.
Los conductores de motores relucen en todas las conversaciones sobre el tráfico y no es casualidad, cayendo incluso en la “inocencia” de abandonar el carril a esperas de que el semáforo cambie con ellos debajo de un elevado, haciéndolo “para que no les dé el sol”, de acuerdo con lo relatado por uno de ellos.
En el peor de los casos, cruzan de las interacciones sin mínimo respeto a la luz roja. Lo mismo que conducir en paralelo con otro grupo de motociclistas, lo cual es contrario a la Ley de Tránsito que prohíbe este acto.
De las necedades comunes también destaca la inobservancia a las señaléticas, como son los letreros de “no doblar a la izquierda” de los que choferes -sin distinción del vehículo- hacen caso omiso.
Lo propio con los pasajeros y conductores del transporte público, quienes no obedecen a la señal de “prohibido dejar o recoger pasajeros”, realizando lo contrario a lo establecido por las autoridades de tránsito.
Este tema concita la atención en momentos que se firma el Plan Nacional de Seguridad Vial, bajo el cual se busca reducir en un 50 por ciento los decesos por siniestros viales una vez llegado el 2030. La meta no es posible sin dar atención a las infracciones más comunes.
Los datos del Observatorio Permanente de Seguridad Vial recopilan más de 3,000 muertes anuales por accidentes de tránsitos en las carreteras del país, traduciéndose a ocho fallecimientos por día en siniestros viales.
De acuerdo con el Informe sobre el Estado Mundial de la Seguridad Vial que emitió la Organización Mundial de la Salud en 2023, la República Dominicana se encuentra en el puesto trece (13) a nivel mundial de muertes por accidentes de tránsito.