El tribunal de ejecución de la pena del primer juzgado de paz especial para transito varió este viernes la medida de coerción a favor del acusado de arrollar con su vehículo al joven deportista Imanol Mercado Cruz, hijo único de la periodista Miriam Cruz.
inmediato, la madre del malogrado prospecto lamentó la decisión y dijo sentirse muy triste con la misma, tras advertir que muchas madres dominicanas seguirán sufriendo “mientras tengamos decisiones como la que se tomó hoy”.
“Con decisiones como estas no solo habrá madres sufriendo como yo en República Dominicana, sino que seguiremos como país ocupando el primer lugar a nivel mundial en accidentes de tránsito”, afirmó.
Miriam Cruz lamentó que a la justicia no le haya importado la vida de un niño “que estaba listo para ir a la sociedad a ser un ente social de bien. “Solo esperamos que la justicia divina sea cumplida”.
De su lado, el abogado de la familia Cruz-Mercado, licenciado Robert Martínez, calificó la sentencia como funesta y desafortunada
decisión es desafortunada y envía un mensaje muy peligroso a la sociedad porque no solo se trata de una persona que quitó la vida a un joven que estaba casi a punto de ser firmado en el béisbol profesional, sino que también lo dejó abandonado”, señaló Robert Martínez.
Explicó que se trata de una grave decisión que preocupa porque si un conductor es capaz de dejar abandonado a un jovencito que acababa de atropellar, “¿no va ser capaz de abandonar el proceso y darse a la fuga?
Criticó que el juez dejara en libertad al responsable de matar por su manejo temerario al joven Mercado Cruz, tras lamentar que apenas le pusiera la garantía insignificante de un millón de pesos, además de presentación periódica e impedimento de salida.
“Insistimos en que, si él fue capaz de dejar abandonado al joven, no va a ser capaz de abandonar su propio proceso. Por eso la Corte había dicho que la única medida factible para asegurar su presencia en un juicio de fondo, era la prisión preventiva”, indicó.
Dijo que, sin embargo, “el juez ha decidido que con una simple garantía de un millón de pesos a través de una compañía de seguro es sufic9oente para garantizar su presencia en el juicio”.
“Es una decisión funesta, que envía un mal mensaje a todos los conductores y no toma en cuenta la obligación que establece la ley al conductor, de recoger a una persona atropellada. Eso no tiene consecuencias para el juez”, sostuvo.