
El Gobierno británico anunció que el rey Carlos III, como líder supremo de la Iglesia anglicana, había aprobado el nombramiento propuesto por el Colegio de Cánones de la Catedral de Canterbury.
La obispa de Londres, Sarah Mullally, fue nombrada este viernes arzobispa de Canterbury, convirtiéndose en la primera mujer que encabeza la Iglesia de Inglaterra y es jefa espiritual de los anglicanos.






