
Santo Domingo. — La embajadora de los Estados Unidos en República Dominicana, Leah Francis Campos, reveló hoy que durante la administración de Joe Biden existió una fuerte presión diplomática para que el país mantuviera la frontera con Haití abierta. La afirmación fue hecha durante su primer discurso ante la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana (AMCHAMDR).
Según la diplomática estadounidense, esa presión respondió al interés de Washington de permitir el flujo hacia su territorio de personas procedentes del vecino país, pese a que muchos entrarían de forma irregular. “La administración Biden buscaba que RD mantuviera los pasos abiertos, incluso cuando la situación de seguridad y migración era crítica”, declaró Campos.
Campos advirtió que la grave crisis de Haití representa una amenaza no solo para República Dominicana, sino también para Estados Unidos, lo que —aseguró— motiva los esfuerzos binacionales en materia de seguridad fronteriza y combate al narcotráfico.
En ese contexto, la embajadora reafirmó que la actual administración estadounidense, bajo el liderazgo de Donald Trump, respaldará una política de fronteras seguras basada en la soberanía nacional y el control migratorio, evidenciando un giro respecto a la administración precedente.
RD, uno de los socios más fieles de EEUU
En su intervención, la embajadora Campos destacó la profundidad histórica y estratégica de la relación bilateral, afirmando que, desde hace mucho tiempo, la República Dominicana es uno de los socios más fieles de los Estados Unidos en el Caribe.
“Juntos, hemos trabajado para ampliar la cooperación en materia de seguridad, fortalecer la educación y mejorar la salud pública. Cuando nos mantenemos unidos, ambos nos hacemos más fuertes […] Por lo tanto, el trabajo que hacemos juntos es, literalmente, ‘America First’ y ‘the Dominican Republic First’ al mismo tiempo. Es decir, respetamos y celebramos plenamente que la República Dominicana ponga a la República Dominicana en primer lugar. Así es como operan los verdaderos socios y amigos: respetando la soberanía, los valores y las prioridades de cada uno”, expresó.
La diplomática articuló su ponencia alrededor de tres pilares: seguridad, fortaleza y prosperidad. Sobre seguridad, subrayó la importancia de la lucha contra el crimen financiero y las actividades ilícitas, indicando que “cuando detenemos el flujo de dinero ilícito, protegemos los puestos de trabajo, las familias y las comunidades. Mantenemos la equidad de nuestros mercados, la credibilidad de nuestras instituciones y la seguridad de nuestra población”.
En cuanto a la fortaleza económica y comercial, reafirmó el compromiso de su misión en el país: “Mi Embajada está comprometida con promover los intereses comerciales de los Estados Unidos y de sus empresas en la República Dominicana, mientras buscamos formas de ampliar y mejorar el comercio recíproco entre nuestros dos grandes países”. Asimismo, destacó el potencial del nearshoring y la creciente integración dominicana con la industria estadounidense de semiconductores, calificando este momento como propicio para fortalecer la cooperación en sectores estratégicos.
En el pilar de prosperidad compartida, Campos valoró positivamente los avances institucionales del país:: “acogemos con satisfacción los esfuerzos de la República Dominicana por fortalecer las instituciones y mejorar la eficiencia regulatoria, esfuerzos que ayudan a atraer inversiones de alta calidad desde los Estados Unidos”. Añadió que durante su misión trabajará para impulsar más oportunidades económicas a través de iniciativas conjuntas.
Durante el almuerzo, Francesca Rainieri, presidenta de AMCHAMDR, ofreció unas palabras de felicitación y bienvenida a la embajadora Campos, destacando el buen momento que vive la República Dominicana como socio estratégico de los Estados Unidos. Señaló que “la República Dominicana ha demostrado ser un socio regional seguro, estable y confiable, con una economía dinámica, un sector empresarial vibrante y un compromiso claro con la estabilidad macroeconómica y con la seguridad jurídica. En un entorno global desafiante, donde se necesitan cadenas de suministro resilientes, entornos de inversión predecibles, integridad institucional e innovación y sostenibilidad, nuestro país avanza con pasos firmes. Hoy somos un destino atractivo para la inversión, un actor relevante en el nearshoring, un hub competitivo para la región y un aliado estratégico y confiable”.
De su lado, el vicepresidente ejecutivo de AMCHAMDR, William Malamud, reiteró que la colaboración público-privada ha sido muy relevante para consolidar avances concretos en el clima institucional del país. “Durante los últimos años, la República Dominicana ha demostrado que cuando el sector público y el sector privado colaboran con visión compartida, los resultados son visibles, medibles y transformadores. Hoy podemos afirmar, con evidencia concreta, que la República Dominicana ha logrado avances significativos en áreas críticas para la relación bilateral”, expresó.






